Por Rodolfo Cortés Calderón
En la década pasada con inusitada espontaneidad, compromiso, alegría y esperanza y después del golpe de Estado del 2009 surgió en Honduras el movimiento de resistencia que posteriormente se nutrió con las llamadas antorchas. Millares de ciudadanos, hombres y mujeres, se movilizaron por meses en Tegucigalpa, San Pedro Sula, Choluteca, Tocoa, La Ceiba, El Progreso y tantos municipios y hasta pequeñas aldeas a nivel nacional, exigiendo el retorno a la constitucionalidad y la democracia, castigo a los golpistas y urgiendo a la OEA y al Departamento de Estado de Estados Unidos, sacar las manos de Honduras.
Traemos a colación este comentario porque desde aquel fatídico año Honduras vivió una tremenda encrucijada por más de diez años con un gran saldo de asesinatos, desaparecidos, desterrados, perseguidos y criminalizados. La economía popular cayó en bancarrota.
Fueron doce años de la dictadura nacionalista encabezada por el bipartidismo que detentaron Roberto Micheletti Baín, Porfirio Lobo Sosa y el mal recordado narcotraficante Juan Orlando Hernández, JOH, que sumió al país en una oscura y tenebrosa noche, sólo comparable con la dictadura de Carías Andino.
¿UN SUEÑO LA SOBERANIA 2021?
Rememorando que el año 2017 en una histórica concentración de la Plataforma para la Conmemoración del Bicentenario Patrio, y en un acto histórico realizado en el parque central y enfrente de la municipalidad de San Pedro Sula, encabezado por el sacerdote Ismael Moreno Coto, padre Melo, nos propusimos los ahí congregados con miras al año 2021 haber iniciado un proceso de recuperación y refundación del país.
El periodista mexicano Emiliano Ruiz Parra en un extenso y explosivo escrito sobre la grave crisis política que vivía Honduras, fechado el 26 de marzo de 2017, relacionado con la iniciativa ´´Soberanía 2021´´ propuesta por el padre Melo, escribió: ´´El padre Melo no mira hacia 2017 sino a 2021, cuando Honduras celebrará el bicentenario de su independencia. Promueve la creación de un programa de nación llamado Soberanía 2021, una agenda de lucha para enfrentar lo que define como la potencial ¨dictadura personalista¨ del presidente Hernández´´
Y continuó escribiendo Ruiz Parra: ´´Moreno dice que seguirá su trabajo desde su posición de sacerdote. Es decir, sin buscar puesto en el gobierno. Según él, los momentos de represión y autoritarismo como el que actualmente vive Honduras pueden convertirse en oportunidades para el movimiento social´´
Desde aquél año hacia tal objetivo se dirigieron las baterías de los diferentes sectores sociales y políticos organizados del país. Los frutos estaban cerca.
EL TRIUNFO DE XIOMARA CASTRO SARMIENTO
Las movilizaciones de la resistencia y de las antorchas y el fino trabajo de las organizaciones populares, sociales y políticas dieron su fruto el 28 de noviembre del 2021 cuando el pueblo hondureño, sin distingos de colores– aunque Libre pretende atribuirse este triunfo–en una fiesta cívica se volcó a las urnas con la esperanza de llevar a través de una alianza partidaria a Xiomara Castro Sarmiento como su candidata, logrando un triunfo avasallador y llevando de esta forma a la primera mujer como presidenta de Honduras. Este triunfo de la democracia, coincidió con el año en que Centroamérica y Honduras en especial, cumplía 200 años de su estrecha y cuestionada independencia.
Junto con la presidenta Xiomara Castro, de LIBRE, el presidente del Congreso Nacional, Luis Rolando Redondo Guifarro, del PSH, han hecho un gobierno que si no es de lo mejor, ni en sombras se parece a sus antecesores: apátridas, criminales, entreguistas y serviles al Imperio. Esto aun en contra de ciertos politiqueros que han puesto muchos obstáculos, tanto de Libre y el PSH, no digamos la mafia del bipartidismo.
FALTA UNA CORTE SUPREMA Y FISCALIA DIGNAS
Pero las cerezas sobre el pastel todavía faltan y es aquí donde queremos llamar a la sensatez y la lucha del pueblo y concretamente a los movimientos que otrora dieran grandeza a la nación: la resistencia, las antorchas y las comunidades organizadas. En estos días y meses se juega el todo por el todo con la elección de la Corte Suprema de Justicia, CSJ, y la Fiscalía General.
No podemos permitir que estas instituciones del Estado vuelvan a caer en manos de caciques o politicastros dueños de los partidos, de la ideología que sea, del poder oligárquico o que respondan a intereses de la embajada de Estados Unidos.
CONCLUSIONES
· Hoy día con mayor rigurosidad y disciplina es necesaria la movilización de la resistencia y de las antorchas para que el sueño que iniciamos el 2022 de refundar el país no se apague. Necesitamos una Corte Suprema de Justicia y una Fiscalía General con sabor a pueblo y que no responda a los enormes intereses de los sectores fácticos y oligárquicos que históricamente nos han sometido.
· La ciudadanía hondureña debe de estar expectante sobre cada paso que dé el Congreso Nacional en cuanto a la elección de la CSJ, dominado como lo sabemos por los sectores más oscurantistas y retardatarios del medio y donde aún influyen las decisiones del narco-dictador JOH desde la cárcel.
· El proyecto ´´Soberanía 2021´´ no es para cambiar caras o partidos políticos en los tres poderes del Estado; mucho menos reparto de prebendas o canonjías; tampoco protección de los intereses oscuros de la invisible oligarquía. Es empezar a construir los sueños de soberanía, libertad, independencia, bienestar y desarrollo teniendo como principal actor al pueblo hondureño en toda su expresión. Es deconstruir las estructuras de injusticia, racismo, saqueo, corrupción y narcotráfico a que ha estado sometida la nación en sus 200 años de fallida independencia.
¡Tienen la palabra los personajes y dirigentes de la que otrora se llamaran la resistencia o las antorchas!
¡Construyamos la Patria grande de Morazán, Bolívar y Martí !
04 de febrero 2023
