Por: Juan Almendares Bonilla*
Escribo de forma urgente esta carta dirigida a la conciencia de cada ser humano y organización solidaria con este pueblo que es uno de los mas golpeados por la barbarie de la mundialización del capital.
Como decía Saramago:
“Se está preparando un mundo para los ricos… ¿Qué podemos oponerle? No tenemos poder, no estamos en el gobierno, no tenemos multinacionales, no dominamos la finanza especulativa mundial. ¿Qué es lo que tenemos para oponer? Nada más que la conciencia. La conciencia sobre los hechos, la conciencia de mi propio derecho, de que soy un ser humano y que no quiero ser más que eso; la conciencia de que lo que está en el mundo me pertenece –no en el sentido de propiedad –, me pertenece como responsabilidad, como derecho a saber, derecho a intervenir, derecho a cambiar. Eso se llama la conciencia”: José Saramago
El 28 de febrero 2017, Suyapa Martínez en su calidad de representante de la organización de mujeres CEM-H fue notificada acerca de la demanda presentada por una empresa Hidroeléctrica. La citada demanda corresponde a un millón de lempiras por indemnización por daños y prejuicios.
El juicio contra la defensora de derechos humanos y del ambiente Suyapa Martínez se refiere a sus declaraciones sobre la situación de violación de los derechos humanos que confrontan los pueblos indígenas lencas, sobre el encarcelamiento de los ríos y en particular el femicidio de Bertha Cáceres.
Suyapa es una dirigente reconocida por defender los derechos de la mujer; por lo cual fue nombrada integrante propietaria ante el Mecanismo Nacional de Protección de Defensores/as de los Derechos Humanos. Es denunciante del femicidio de Bertha Cáceres y el crimen contra los pueblos indígenas. El juicio contra Suyapa tendrá lugar el 21 de marzo 2017 a las 10:AM en Tegucigalpa.
En las comunidades indígenas campesinas y garífunas la alegría de los niños y niñas es bañarse en las aguas libres de los ríos y mares. La alegría de la libertad es la vida misma y es la expresión de la lucha por la existencia de la cultura y la dignidad histórica de los pueblos. El coraje de vivir con alegría emerge como un poema de amor en el océano de quinientos años de sufrimiento.
En siglo XXI, se ha intensificado la política del despojo y la desposesión por acumulación del capital. Se estrangulan la subjetividad, las emociones, y el pensar que siente. Las calles y plazas son cerradas para criminalizar la protesta.
Hoy y siempre recordamos al joven estudiante desaparecido Roger González cuya conciencia contra la ocupación militar estadounidense gritaba en los actos de protesta: ¡Nos podrán quitar todo, pero nunca podrán quitarnos la alegría!
Según el derecho positivo del capital transnacional aliado con la oligarquía consideran que quienes producen daños irreparables al país son las victimas de las violaciones a los derechos humanos y ambientales y no sus perpetradores.
El coraje de la alegría de Suyapa Martínez es el grito de protesta e indignación ante el trauma, terror, tortura y muerte generados por la monstruosa impunidad del Estado Policial Militar. La justicia no solo puede definirse con la lente de la ley formal sino por la tasa de ganancia, cuando la ley responde a los intereses económicos y políticos dominantes se transforma en el instrumento violento estructural contra la justicia es la forma jurídica que expresa poder del capital que aplasta los derechos históricos de nuestros pueblos que se manifiestan en mayor grado en los indígenas, garífunas, familias campesinas y la clase trabajadora.
En este sentido la ley es la síntesis del racismo, clasismo y sexismo patriarcal que tiene su origen y reproducción histórica y estructural en el viejo y nuevo colonialismo, en la mundialización del capital trasnacional que utiliza los operadores de la justicia legal: jueces , fiscales como integrantes de los cuerpos represivos : militares y policías que estigmatizan, persiguen y violan los derechos humanos y ambientales .Honduras es un país singular donde se ha encontrado el experimento geopolítico militar, donde la reorganización de la administración de la justicia tiene como eje fundamental la inteligencia que controla la información vigila ,controla y reprime mediante los aparatos: militares , policiales, y fundamentalistas religiosos. Es el experimento que caracteriza a la “democracia encarcelada y a la seguridad embozada”.
El experimento no solo es de inteligencia (orejas y cámaras electrónicas); si no también de guerra psicológica, guerra mediática, guerra económica: desempleo masivo, cierre de empresas; fundamentalismo religioso, femicidio, asesinato de la diversidad sexual, de abogados, periodistas, ambientalistas, campesinos e indígenas y defensoras (es) de los derechos humanos.
Este ensayo que penaliza la protesta social en Honduras va ser puesto en práctica en otros países latinoamericano con objeto de frenar los procesos de enmacipacion política.
Suyapa Martínez y el pueblo hondureño apelan a nuestra conciencia solidaria sobre la justicia y respeto a los derechos humanos y de la Madre Tierra.
Tegucigalpa, 9 marzo 2017.
*Defensor de Derechos Humanos; Director del Centro de Prevención, Tratamiento y Rehabilitación de Víctimas de la Tortura (CPTRT).