Tierra Colorada, Lempiras (CONEXIHON).- Luego de conocer que condenaron a 15 años de prisión a uno de los victimarios de su hijo, don Natividad Hernández considera que son nada por la vida de su hijo “él era sembrador del evangelio, predicaba la palabra de Dios y denunciaba las injusticias y la corrupción en la comunidad”, acotó el señor Hernández progenitor de Pablo Hernández, comunicador social asesinado en el año 2022 en la comunidad Tierra Colorada en Gracias departamento de Lempira.
Fue en el Juzgado de Letras de lo Penal de Gracias, Lempiras, en donde se desarrolló la audiencia de procedimiento abreviado en el proceso penal instruido contra José Isai Melgar, quien ante el juez aceptó haber participado en el asesinato de la hoy víctima, Pablo Hernández conocido líder indígena, defensor de los derechos humanos y comunicador social.
Trasciende en reporte informativo de Defensores en Linea que en dicha audiencia el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), quien se constituyó como acusador privado, en representación de los padres de la víctima, solicitó al juez hacer constar en acta las amenazas vertidas por el hoy imputado en perjuicio de Natividad Hernández, padre del líder indígena, asesinado el 9 de enero de 2022.
Luego de escuchar las partes, el juez Pedro Luis Murillo Melgar procedió a dar el veredicto, condenando al imputado a 15 años de reclusión. “los 15 años son un regalo al hechor, quitar la vida de una persona como Pablo tuvo que ser más severa” reitero el señor Natividad al equipo técnico del Comité por la Libre Expresión C-Libre.
“Otro de los sospechosos del crimen, está en tierra extranjera y según expediente son tres, pero sólo se habla de dos personas”, sostiene el señor Hernández. De hecho, hizo el correspondiente llamado a las autoridades de la Dirección Policial de Investigación(DPI) para que hagan las diligencias del caso para dar con él paradero de los otros dos autores material del crimen de su hijo y sobre todo el autor intelectual que podría ser Guadalupe Muñón, ex alcalde de Tierra Colorada quien se habría molestado perder la reelección municipal en el 2021, debido a las denuncias públicas que hizo Pablo Hernández en la radio comunitaria Tenán, de la cual era director. “Pablo le dijo a su mamá que lo iban a matar no por malo sino por las denuncias de los actos de corrupción e injusticias que había denunciado en la radio”, comentó don Natividad.
En algunas indagaciones hechas por C-Libre entre algunas personas cercanas a Pablo Hernández, se conoció que los durante los últimos seis años de los 12 que el señor Muñoz fungió como alcalde desde Radio Tenán se informó a la población de Tierra Colorada sobre las injusticias e irregularidades administrativas que ocurrían en la municipalidad, dicha acción informativa de Pablo Hernández provocaría que en el proceso eleccionario del 2021 Guadalupe Múñoz, luego de 12 años de autoridad municipal, perdiera la reelección dejando una deuda municipal de por lo menos 14 millones de lempiras, “esto le molestó y muy posiblemente por eso diera la orden de matar al comunicador social, quien desde la edad de 12 años se distinguía como Delegado de la Palabra de Dios”, puntualizó el entrevistado, de quien nos reservamos el nombre por asuntos de seguridad de la fuente.
Denota la fuente que entre uno de los extremos a investigar que tiene la DPI es que el día del asesinato (9 de enero 2022), el señor Guadalupe Múñoz diera declaraciones, instantes después del asesinato, en radio emisoras de Gracias Lempira; argumentando que no tenía nada que ver con el asesinato de Pablo Hernández, cuando nadie apuntaba señalamientos hacia él, como responsable del asesinato. Tierra Colorada y la ciudad de Gracias, dista 60 minutos en automóvil.
Por el crimen de Pablo Hernández solo se ha condenado a José Isai Melgar, pero defensoresenlinea.com conoció que se han presentado dos requerimientos fiscales, contra igual número de implicados. Pablo Hernández era un reconocido líder indígena lenca que defendía y promovía los derechos de su pueblo desde diversas plataformas.
Pablo Hernández se desempeñaba como director de la Radio Comunitaria Tenán y era miembro de la Red de Defensores de Derechos Humanos del departamento de Lempira. Era alcalde Mayor de la Auxiliadora de la Vara de Alta de Caiquin, presidente de la Red de Agro ecólogos de la Biósfera Cacique Lempira y, además, promovía la creación de la Universidad Indígena Lencas y de los Pueblos.
Como parte de su compromiso social, denunció todo tipo de acciones ilegales que eran cometidos en contra de la comunidad por parte de las autoridades locales y esto le generó persecución, amenazas y finalmente su muerte.
Martina López, cercana de Pablo Hernández, al conocer la sentencia lamenta que nuestra justicia sea tardía y que las personas que al final pagan por esos crímenes son los últimos en la línea, “Nos gustaría que el sistema de justicia fuera más eficiente y llegar a los verdaderos asesinos, a los que intelectualmente planearon y fueron la orden del asesinato”, dice López.
A dos años de su asesinato, “la herida no ha sanado, porque tuvimos mucha convivencia, coincidíamos en la forma de ver el mundo, de concebir la la vida todavía es muy doloroso su recuerdo”, sostiene Martina.
“El siempre tenía algo que hacer, siempre tenía un tema de qué hablar. Y se ocupó tanto en los últimos años como que él sabía que eran en los últimos años de vida que no perdió tiempo en su vida para hacer las cosas buenas y de bien para la comunidad”, puntualizó.