San José, Costa Rica (Conexihon).- Eduardo Urbina, líder estudiantil, fue puesto en libertad días después que el gobierno de Costa Rica aceptara su solicitud como refugiado, anunció este miércoles el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL).
Luego de un mes de estar en una prisión costarricense, el pasado 23 de abril, Eduardo Urbina fue puesto en libertad, a la espera de que el Estado resolviera la solicitud de refugio, dijo la organización internacional por medio de un comunicado de prensa.
CEJIL detalló que luego de análisis de los hechos y la prueba, la Comisión de Visas Restringidas y Refugio de la Dirección General de Migración y Extranjería de Costa Rica, reconoció el estatus de refugiado producto del riesgo que vive Urbina “por su rol como activista político, dirigente estudiantil, y defensor de los derechos humanos en Honduras”.
Para la directora del Programa para Centroamérica y México de CEJIL, Marcia Aguiluz, el riesgo valorado en el caso específico de Eduardo Urbina “se enmarca en un contexto de violencia y violaciones a los derechos humanos contra personas defensoras, organizaciones y comunidades que defienden los derechos humanos en Honduras”.
Aguiluz puntualizó que “Es indispensable que se ponga un alto a la represión y la criminalización y que el Estado garantice el derecho a defender derechos humanos”.
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Desde mediados del año 2017, Urbina viene siendo víctima de constantes ataques y amenazas contra su integridad. El pasado 01 de mayo, fue detenido por unas horas y fue golpeado. De igual forma, durante las acciones de protesta del Movimiento Estudiantil Universitario (MEU) en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), el joven tuvo una participación en el proceso ya que es estudiante de tercer año de la carrera de Historia.
Sin embargo, las acciones de protesta de la Alianza de Oposición contra la Dictadura, que reclamaban como ganador de los comicios de noviembre pasado a su candidato, Salvador Nasralla, Urbina quien es miembro del Partido Libertad y Refundación (LIBRE), fue objeto de una campaña de desprestigio en redes sociales y el gobierno hondureño lo responsabiliza de incendiar un camión militar en una protesta en la carretera que conduce hacia el norte del país, el 15 de diciembre de 2017.
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Cinco días antes de este hecho (10 de diciembre), el líder estudiantil salió del país al denunciar amenazas contra su vida. Acción que fue gestionada por el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH).
Bertha Oliva, Coordinadora del COFADEH manifestó que este hecho “refleja la hostilidad con la que el gobierno de Honduras criminaliza a personas que han decidido sacar la voz por un país en el que no existen las mínimas garantías de protección a los derechos humanos. Celebramos que, en el entendimiento de dicha situación, el gobierno de Costa Rica haya reconocido su condición de refugiado”, manifestó Berta Oliva Coordinadora del COFADEH.
Entre las organizaciones que se han encargado del caso del joven universitario, además de CEJIL y COFADEH, está la Asociación Costarrincense de Derechos Humanos (ACODEHU), la que realiza permanentemente acciones de incidencia y acompañamiento en aquel país.
Aunque haya sido aceptado en calidad de refugiado, las autoridades hondureñas se niegan a retirar el proceso penal contra Urbina, por lo que regresar a su país, significaría colocarlo tras las rejas y volver a su condición de preso político en su propia patria.
