Tegucigalpa, Honduras (Conexihon).- Toda la información relacionada con el patrimonio arqueológico e histórico de la denominada «Ciudad Blanca o la Ciudad Perdida del Dios Mono» es un secreto de Estado para los hondureños.
El Instituto Hondureño de Antropología e Historia (IHAH), mediante oficio No. 128-G-2010 de fecha 24 de mayo de 2010, siendo Gerente el Ingeniero Virgilio Paredes Trapero, solicitó al Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP), aprobar la clasificación de información.
De acuerdo con la resolución 85-2012, el IHAH, aprobada por el IAIP el 25 de mayo de 2012, se clasifica como reservada, la información relacionada con el descubrimiento de lo que podría llamarse “Ciudad Blanca o Ciudad Perdida”, en el departamento de Gracias a Dios.
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Esta acción ocurre pese a que con la resolución 22-2010 se mantiene sin reserva, es decir que denegó la solicitud presentada dos años antes en lo relacionado con la información sobre mapas, informes, listados, inventarios o fichas técnicas que contengan datos específicos (coordenadas) sobre la ubicación de sitios arqueológicos del país.
Escultura de «Ciudad Blanca» colocada en la municipalidad de Brus Laguna, Gracias a Dios.
En el año 2015, el medio de comunicación internacional National Geografic firmó un convenio con el Gobierno hondureño para explorar “Ciudad Blanca”, según informó Diario La Prensa.
También National Geografic realizó un reportaje liderado por arqueólogo llamado Chris Fisher, quien se adentró a la selva de La Mosquitia Hondureña en un helicóptero en busca de la Ciudad Perdida del Dios Mono conocida como “Ciudad Blanca”.
Ver reportaje:
El escrito detalla: “En la base de la pirámide, asomando apenas del suelo, se distinguía la parte superior de decenas de esculturas de piedra de bella factura. Las piezas, tapizadas de musgo y vislumbradas bajo la alfombra de hojas, cobraron forma en la penumbra de la selva: la amenazadora cabeza de un jaguar, una vasija de piedra decorada con la cabeza de un buitre, grandes recipientes tallados con figuras de serpientes y un conjunto de objetos que parecían tronos o mesas ornamentadas, y que en terminología arqueológica se denominan metates. Todas las piezas estaban en perfecto estado, como si nadie las hubiese tocado desde que varios siglos atrás fueran abandonadas”.
Vista aérea de La Mosquitia, Honduras.
“Al enterarse del hallazgo, Juan Orlando Hernández, presidente de Honduras, ordenó que una unidad militar protegiese el yacimiento de los saqueadores las 24 horas. Semanas después viajó al lugar en helicóptero para verlo en persona y expresó el compromiso de que su Gobierno hará «lo que haga falta» para avanzar no solo en la investigación y protección del legado cultural del valle, sino también del patrimonio ecológico de la región circundante”.
En el mes de noviembre del año 2018 el gobierno de turno inauguró el Centro de Investigación Arqueológico dedicado al estudio de “Ciudad Blanca”, ubicado en los predios aledaños al aeródromo El Aguacate del municipio de Catacamas, departamento de Olancho.
En el mes de julio del presente año integrantes de la Asociación Misquita MASTA realizaron un plantón por casi un mes en las afueras de la instalación de Casa presidencial, una de sus exigencias fue la aprobación de una ley de saneamiento territorial, la que servirá para desalojar a las personas que se han adueñado del territorio indígena Misquito.
Ver transmisión en vivo:
Avilés Morfis, integrante de la organización misquita Masta, en conversación con Conexihon.hn sostuvo que “esa ley lo que nosotros queríamos que se aprobara es el saneamiento territorial, el desalojo de las personas que han invadido las tierras misquitas y que han entrado en las montañas en la Biósfera del Río Plátano y que no solo han estado allí sino que han descombrado en gran cantidad, por lo tanto venimos a exigir de no entrar en confrontación con las personas que están destruyendo la flora y la fauna, ahora hay que darle seguimiento a esta ley para que se ejecute”.
La población de La Mosquitia es la menos informada sobre el descubrimiento.
“El saqueo de la Ciudad Blanca lamentablemente que no se quedó en La Mosquitia no se hizo un museo en Gracias a Dios para que nosotros tuviéramos una entrada para visitantes o museo, sino que se trajo para la capital o a exportado piezas valiosas”, lamentó Morfis.
“Nos molesta eso nos inquieta con la riqueza que hay en La Mosquitia lo extrae lo exhibe y se destina para otro fin se debió de hacer un museo en la Mosquitia, personas del departamento de Colón han entrado para saquear la ciudad blanca ha habido capturados, nosotros lo que pedimos al Gobierno que haga un museo en Puerto Lempira para que los turistas vayan a Gracias a Dios a apreciar la riqueza que tenemos”, añadió.
De su lado, Yuam Pravia, periodista del Pueblo Indígena Misquito, expresó que “en el marco del convenio 169 de la OIT que fundamenta la Libre determinación para los Pueblos Indígena los documentos ancestrales que respaldan la libre determinación y los procesos de consulta que deben haber y también el protocolo biocultural del Pueblo Miskito que lo ha trabajado Masta desde el 2010 son instrumentos legales además de la Constitución de la República de Honduras que señala la obligación del Estado apoyar a los pueblos autóctonos y lamentablemente han hecho acompañar a su manera no como la cosmovisión Miskita requiere por ende reflejar que el tema de la Ciudad Blanca”.
“Fue histórico sabemos que ya toda la Población Miskita sabía de ello, para nosotros no era algo nuevo, se considera que si hubo robo se movieron piezas arqueológicas que se encuentran en el museo del aguacate en Catacamas, Olancho, y que esas piezas están en proceso de estudio pero eso no lo ha dicho las autoridades pertinentes, se les hizo comunicado público de que se devolvieran las piezas a la Mosquitia y se pidiera perdón a la población Misquita por haber tocado sin permiso pero ellos hicieron caso omiso. Lamentamos la exclusión que se hace al Pueblo Misquito y que se quieran aprovechar de los recursos que tiene nuestro departamento y que no buscan la manera de cómo protegerlas, conservarlas y cuidarlas”, finalizó.